Se trata del único tratamiento con aparatología que se puede realizar antes, durante y después de la exposición solar, sin agredir la piel y obteniendo resultados en cada una de las fases.
- Antes: prepara la piel hidratándola y nutriéndola para conseguir un bronceado más rápido y uniforme. Además actúa sobre las arrugas, flacidez e imperfecciones.
- Durante: mejora el acceso de las moléculas antioxidantes responsables de combatir los efectos de los radicales libres generados por la exposición solar.
- Después: regenera e hidrata los tejidos que el sol ha lesionado y prolonga el bronceado adquirido.
Gracias al sistema Proionic®, una de las tecnologías más demandadas en el ámbito de la estética, se consigue recuperar la vitalidad de los tejidos, preparando la piel para la exposición solar y regenerándola después. Estos efectos se consiguen no sólo durante el tratamiento sino que perduran en el tiempo.
La técnica se consigue a través de la aplicación de una corriente con una frecuencia específica (448 kHz) vehiculizada a través de dos electrodos, y un aumento de la temperatura corporal (no de calor) a nivel profundo entre 3 y 5 grados. El tratamiento es cómodo y muy agradable, tanto para el receptor como para quién lo aplica.
Según el Dr. Sebastiá Sendrós, médico de Indiba®, este tratamiento mejora la calidad del bronceado. «Si lo aplicamos dos semanas antes de la exposición al sol mejora la calidad de la piel, su apariencia y luminosidad, reduciendo las arrugas e incrementando la hidratación, por lo que la prepara para beneficiarse al máximo del sol».
Y es que tomar el sol con una piel preparada logra una distribución más homogénea del bronceado. «La presencia de arrugas, imperfecciones o flacidez, no permite adquirir un tono regular, objetivo que sí se consigue al optimizar al máximo las características de la dermis», apunta.
Indiba® disminuye los efectos nocivos del sol porque, según el doctor, la exposición solar integra diferentes tipos de radiaciones. Aunque tomar el sol conlleva múltiples, también implica la generación de unas moléculas altamente inestables conocidas como radicales libres. «Éstas tienen un efecto nocivo para los tejidos biológicos, pueden desencadenar trastornos degenerativos y están íntimamente relacionados con el envejecimiento celular».
Este tratamiento mejora el acceso de las moléculas antioxidantes responsables de combatir sus efectos y regenera e hidrata los tejidos que el sol ha lesionado. El doctor recomienda efectuar un programa de 6 sesiones (distribuidas en 2 semanas) lo que permitirá preparar adecuadamente la piel para conseguir los mejores resultados.
Durante la exposición al sol, la aplicación de Indiba® depende del fototipo, del tiempo de exposición solar, y del factor de protección utilizado en la exposición. «Para pieles de tipo mediterráneo de una pigmentación media (exposiciones de entre 2 y 4 horas y con SPF medios) puede aplicarse una sesión semanal de Indiba®«, explica el doctor. Mientras que, tras la exposición solar para recuperar la piel, se recomienda efectuar entre 3 y 6 sesiones tras finalizar la fase de exposición solar.
